Ciudad de México.- Se piensa que una alimentación sana y en balance sólo puede lograrse dentro de casa y de forma errónea se considera que es el único sitio donde se puede mantener una dieta equilibrada.

El reto comienza cuando hay que salir a trabajar, ya que al permanecer en la oficina la mayor parte del día podemos perder con mayor facilidad el control de la ingesta de alimentos. Sin embargo, es importante saber que también en este lugar es posible sostener un plan de nutrición, sólo basta adoptar algunos cambios y modificar de forma muy sencilla ciertas costumbres para lograrlo.

Es común que salgamos de casa apresuradamente sin haber ingerido ningún tipo de alimento, bebida o colación que permita saciar el apetito mientras llegamos a un sitio para comer de forma adecuada. Hay que procurar no salir sin nada en el estómago; no es necesario destinar horas a la preparación de alimentos, pues sabemos que el ritmo actual de vida no nos lo permite, pero se puede recurrir a alimentos crudos o de fácil elaboración.

Estos son algunos consejos que pueden ayudar a mantener una vida sana en la oficina:

· Lleva de casa porciones de frutas y verduras. La European Food Information Council (EUFIC) sugiere consumir al menos cinco raciones de estos alimentos al día, ya que proporcionan nutrientes protectores.

· Lleva contigo un alimento sano, rápido y fácil de preparar como lo es un sándwich, con lo cual seguirás los consejos de alimentación saludable de la EUFIC que señala que la base de la dieta debe ser rica en hidratos de carbono.

· Hidrátate mientras estás fuera de casa. Llevar siempre consigo una botella de agua evitará consumir bebidas azucaradas y ayudará a controlar el apetito.

· Si tu agenda te impide llevar una colación, intenta buscar las mejores opciones para adquirir productos frescos. Hay tiendas que ofrecen raciones de fruta o de comida integral a precios accesibles.

· No olvides desayunar. Esto te dará energía y no estarás con ansiedad; así, evitarás episodios posteriores donde comas de forma compulsiva.

· Es común que en las oficinas se consuman en grupo algunas botanas, intenta evitarlas o, en caso contrario, divídelas en pequeños trozos y prueba sólo un poco.

· Realizar una actividad física después del horario de oficina. No importa lo cansado que te encuentres, te darás cuenta de que hacerlo te brindará energía y estarás más activo.

· Procura llevar contigo comida saludable en varias porciones.

· Fija un horario de comida y mantén ese ritmo. Te ayudará a controlar tu alimentación.

· No olvides cenar antes de ir a la cama. En ocasiones, el horario de trabajo exige muchas horas, pero no dejes pasar la oportunidad de alimentar a tu cuerpo.

Con estos sencillos consejos, es muy posible que puedas mantener una alimentación equilibrada dentro y fuera de casa. Apuesta por una vida sana y mira los resultados en poco tiempo, te sorprenderás.

Sigue a The markethink y entérate de los temas más actuales y sobresalientes de la industria


DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí