Por Víctor Chávez
Director de atracción de talento de Grupo Human
Twitter: @GrupoHuman
Durante los últimos años, el avance tecnológico ha revolucionado las diferentes industrias; poco a poco la dinámica laboral cambió, la interacción entre personas se modificó, los procesos productivos evolucionaron y se comenzó a implementar tecnología con mayor inteligencia artificial y autosuficiente. A estos cambios ya se les conoce como la cuarta revolución industrial.
Este período laboral se sustenta, principalmente, en tecnologías como el internet de las cosas, lo que provoca que se comience a entender la realidad de una manera diferente: industria 4.0.
La cuarta revolución industrial ha impactado de manera considerable los espacios de trabajo, demanda personas que sean capaces de apropiarse de las tecnologías e implementarlas en su día a día. Las empresas requieren personal debidamente capacitado y con los conocimientos necesarios para manipular, operar e incorporar estos avances tecnológicos que, si bien no sustituirán al ser humano, sí apoyarán y complementarán sus tareas en el quehacer laboral.
En ese sentido, las organizaciones tienen de frente un reto: formar líderes que respondan a los desafíos que representan la cuarta generación industrial. En la actualidad, es impensable que una organización permanezca estática, tiene que adaptarse a cualquier cambio y la mejor forma de hacerlo es tener al personal que cuente con las características específicas, de acuerdo con los objetivos de la empresa.
Ese papel juega el líder 4.0 en la empresa, él deberá ser capaz de pronosticar aquellos cambios y guiar a los colaboradores hacia un rumbo de innovación. Un líder 4.0 debe tener características específicas que lo ayuden a enfrentar los retos de la cuarta revolución industrial, o bien, de la industria 4.0:
-Formación continua
-Carácter
-Comunicación
-Negociación
-Resolución de conflictos
El gran diferenciador del líder 4.0, y a la vez su mayor responsabilidad, es el desarrollar habilidades que permitan el crecimiento de las personas del equipo para que posteriormente ellos se conviertan en líderes, responsables de sus tareas y motivaciones.
En resumen, la tarea de un líder 4.0 es formar líderes en un ambiente donde la tecnología ocupa un lugar primordial y deja de ser una herramienta más para convertirse en la protagonista de diferentes procesos tanto administrativos como productivos. Es cuando el líder 4.0 toma su importancia y genera al vínculo entre personas y tecnologías.
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