Ciudad de México.- Hoy en día, leer la etiqueta de la ropa que vamos a comprar tiene una doble importancia: por una parte, podemos saber si está hecha de 100 por ciento algodón, por un tema de comodidad y frescura; por otra, podemos conocer qué tan amable será nuestra prenda con el medio ambiente.
Se sabe por un estudio que realizó Cotton Incorporated que las prendas de algodón son las favoritas de las personas, no sólo en México, sino también a nivel mundial. Y eso se debe a que esta fibra es natural, lo que la coloca como una de las fibras más versátiles en la industria de la moda.
El que una prenda esté hecha de 100 por ciento algodón garantiza, sobre todo en esta época de calor, que será cómoda, suave y fresca. Además, si se usa para hacer ejercicio, no guarda olores después de cada lavada y, en el caso de los pantalones de mezclilla, entre más se usen más “personalizada” se vuelve la prenda.
Respecto a la parte del cuidado del medio ambiente, está comprobado que el algodón, por ser natural, es biodegradable, lo que significa que cuando se tira una prenda hecha de 100 por ciento algodón, al poco tiempo se vuelve a integrar a la tierra. Además, a diferencia de la ropa hecha con fibras sintéticas, en cada lavada el algodón suelta micro partículas que no contaminan ríos y mares. Lo anterior es común que suceda con telas plásticas cuyos residuos son tan pequeños que no se ven cuando las lavadoras realizan el ciclo de enjuague y centrifugado.
“Recientemente, un estudio que realizamos comprobó que la ropa de algodón en treinta días logra degradarse en un 80 por ciento”, reveló Jimmy Rowe, manager de estrategia y análisis de Cotton Incorporated.
“El algodón se adapta a casi cualquier clima, ya que es versátil, transitable y no sofoca, además de que no genera alergias”, destacó Jaime Flores, director senior para América Latina de la compañía.
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