Ciudad de México.- En un mundo cada vez más digitalizado, los niños y adolescentes están expuestos a un creciente número de peligros en línea. Aunque la tecnología ofrece numerosas oportunidades educativas y de entretenimiento, también presenta riesgos significativos que pueden afectar su bienestar y seguridad.
Muchos de los niños son abusados o explotados en las plataformas digitales, otros sufren de cyberbullying o acoso online, y una gran mayoría participa en actividades criminales sin saberlo o termina siendo reclutada y usada para la comisión de diversos delitos.
Ante este panorama y en el marco del regreso a clases, Cyberpeace, empresa especializada en ciberseguridad, hace un llamado a padres de familia y colegios a tomar conciencia y fortalecer las medidas de protección para enfrentar los principales peligros que los estudiantes pueden sufrir al navegar en internet, como son:
• Ciberacoso: El acoso en línea sigue siendo una amenaza grave, con niños y adolescentes siendo blanco de hostigamiento y humillación a través de redes sociales, mensajes y foros. Este tipo de acoso puede tener consecuencias devastadoras para la salud mental y emocional de las víctimas.
• Exposición a contenido inadecuado: Los jóvenes pueden encontrarse con contenido violento, sexualmente explícito o inadecuado sin la supervisión adecuada. Esta exposición puede impactar negativamente en su desarrollo y bienestar emocional.
• Riesgos de privacidad y seguridad: La falta de conocimiento sobre la seguridad en línea puede llevar a la divulgación de información personal sensible. Los datos recopilados sin consentimiento adecuado pueden ser utilizados de manera inapropiada o maliciosa.
• Cibercrimen y fraude: Los adolescentes pueden ser víctimas o perpetradores de fraudes en línea, como estafas de phishing, robo de identidad y fraude financiero. La falta de experiencia y conocimientos puede hacer que sean más vulnerables a estos delitos.
• Contacto con desconocidos: El contacto con personas desconocidas en línea puede llevar a situaciones de riesgo como grooming (manipulación para explotar sexualmente) y otras formas de explotación. Los adolescentes pueden no estar plenamente conscientes de los peligros de interactuar con extraños en la red.
En México, la cantidad de denuncias por delitos cibernéticos realizadas en 2023 reflejan una creciente preocupación por parte de los usuarios mexicanos. Según el Reporte de Incidencia del Delito de Ciberseguridad, publicado por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), durante el primer semestre de 2023, se registraron alrededor de 17,000 denuncias relacionadas con delitos cibernéticos. Esta cifra muestra un aumento en comparación con años anteriores, subrayando el creciente desafío de la ciberseguridad en el país.
Acciones puntuales para proteger a niños y adolescentes de los delitos cibernéticos
Cyberpeace recomienda a padres y tutores establecer una comunicación abierta sobre el uso de la tecnología y los riesgos asociados, así como implementar controles parentales y educar a los niños y adolescentes sobre prácticas seguras en línea.
También sugiere aplicar el principio Zero Trust: no confiar en nada dentro del mundo digital. Ser muy precavidos y verificar toda la información que reciben y a la que están expuestos los niños y adolescentes.
Las escuelas pueden jugar un rol importante en la protección de delitos cibernéticos incorporando la enseñanza de habilidades para la seguridad en línea y la identificación de amenazas cibernéticas.
Y los desarrolladores y empresas tecnológicas deben enfocarse en crear y mantener plataformas digitales seguras, proporcionando herramientas de seguridad y privacidad para proteger a los jóvenes usuarios.
En su informe anual, el FBI reveló que los delitos cibernéticos contra menores de edad siguen siendo una preocupación creciente. En 2023 reportó más de 10,000 quejas relacionadas con el abuso de menores en línea, incluyendo casos de ciberacoso, explotación sexual y otros delitos cibernéticos.
La seguridad en el mundo cibernético es un desafío continuo que requiere un enfoque colaborativo. Proteger a niños y adolescentes en el entorno digital es esencial para garantizar su bienestar y desarrollo seguro.
Los ciberdelitos son una amenaza real y creciente que afecta a la juventud, por lo que es crucial que se trabaje en conjunto para educar, prevenir y proteger a los niños y adolescentes de los peligros en la web. Solo mediante la cooperación y el compromiso se podrá lograr un futuro más seguro para todos.
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