Ciudad de México.- En el verano nuestra piel se acostumbró a la humedad y al calor, pero con la llegada del otoño baja la temperatura y llegan los fuertes vientos; además, el cambio de horario ocasiona que nuestra rutina se modifique y nuestro organismo resiente todos esos cambios.
En esta estación se reduce la secreción de grasa y la transpiración, propiciando que se reseque y dejándola sin defensas frente a los agentes externos, lo que se ve reflejado en su salud y apariencia.
Para combatir la apariencia cansada, el workout facial debe ser la clave de tu rutina de belleza.
¿Qué es el workout facial?
El workout facial es una de las tendencias de belleza más populares de los últimos años, la cual consiste en ejercitar los músculos del rostro para mantenerlos tonificados, dando una apariencia más lisa, uniforme y saludable.
Uno de sus principales beneficios es que brinda firmeza a los músculos de la cara. Cuando los músculos están tonificados propician un efecto lifting que ayuda a una mayor definición del óvalo facial.
Otra de sus ventajas es que promueve la elasticidad de la piel y disminuye la apariencia de las finas líneas de expresión. Además, estimula el flujo de la sangre y la producción de colágeno, libera toxinas por medio de un drenaje linfático y mejora la absorción de los productos faciales.
Más que un masaje, consiste en ejercitar los músculos, para lo cual se necesita de una técnica especial para no lastimarlos ni agredir la piel. En este sentido, los dispositivos electrónicos juegan muy importante para realizar el workout facial y potencializar sus beneficios.
En este sentido, Bear de Foreo combina la tecnología de microcorriente antienvejecimiento con el masaje T-Sonic, los cuales juntos logran entrenar y tonificar de forma segura y eficaz los músculos de la cara y el cuello en tan sólo 2 minutos.
Cuidados adicionales de la piel
1. Limpieza
Durante los meses de otoño, la piel ya no transpira tanto como en verano, pero la limpieza debe seguir siendo un paso fundamental de nuestra rutina porque es la base de una piel saludable y hermosa.
Una adecuada higiene facial nos ayuda a mantener la epidermis libre de suciedad, impurezas y células muertas, además de retrasar los signos del envejecimiento. La limpieza adecuada evita que se acumulen bacterias que puede provocarnos acné e imperfecciones.
2. Hidratación y humectación
La hidratación consiste en la absorción de la humedad, mientras que la humectación atrapa y retiene la humedad. Durante el otoño, la barrera cutánea de la piel se reseca a causa del frío y el viento, por lo que esta queda expuesta a daños externos, dando como resultado un aspecto opaco y con las líneas de expresión muy marcadas.
La correcta aplicación de los productos dermatológicos nos ayudan a restablecer el equilibrio hidrolipídico de la piel. Cuando el daño es muy severo, es recomendable acudir con un dermatólogo.
3. Protección solar
Este paso es indispensable todo el año, pues, aunque los días de otoño son nublados, la radiación daña el cutis, causando envejecimiento cutáneo, manchas y enfermedades graves.
Debes aplicar el protector tanto en exteriores como para la luz de interiores. Aplica el producto por lo menos 15 minutos antes de exponerte al sol o si vas a estar frente a fuentes de luz artificial.
4. Prepárate para el invierno
Como ya se mencionó, el viento y el frío resecan mucho más la piel, por lo que, además de los cuidados anteriores, es muy importante que protejas tu piel desde adentro, tomando 2 litros de agua al día y llevando una dieta balanceada rica en frutas y verduras.
Evita fumar, beber alcohol en exceso, tallar la piel, bañarte con agua caliente y el estrés.
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