Por Itzel Herrera Méndez
Socia fundadora de Agencia de Medios Águila y Sol
Twitter: @Itzelherreram
Probablemente, has escuchado el término fake news desde hace un par de años. El término se refiere a un fenómeno en los medios de comunicación. Específicamente, la prensa digital está viviendo una crisis de veracidad: tan sólo el 36 por ciento de los internautas entre 18 y 49 años confía en la información otorgada por los medios en canales digitales.
Debido a la inmediatez de la información, las audiencias han eliminado los estándares de calidad de la misma y ya no evalúan si es veraz, útil u oportuna.
Los medios de comunicación subsisten de las ventas que la audiencia les genera, háblese de tiraje, rating o clicks. Al no estar en un punto de equilibrio, se deciden por reducir el personal, lo que deja más historias que cubrir con pocas plumas que escribir. La falta de información cubierta por buenos periodistas ha sido sustituida por una nueva fuente: las redes sociales y los blogs.
Internet como nueva fuente de información tiene sus ventajas y desventajas; despliega información amplia y al momento, sin importar la calidad de los reportajes, y entre tanta información es imposible separar el trigo de la paja. Algunos sitios carecen de las buenas prácticas del periodismo profesional en busca de más views, clicks, mayor rating y mejores ventas.
Cuando el éxito de la información es medido en número de views o clicks, el escándalo gana a la veracidad. Ante esta crisis de información, las marcas deben verificar sus cuentas en redes sociales y difundir sus cuentas oficiales en todos los comunicados que desplieguen, lo que ayudará a sesgar y eliminar información que afecte su imagen.
Además, es necesario que en sus páginas de internet y redes sociales tengan disponibles cuadros de diálogo, los cuales les permitirán tener contacto de primera mano con sus consumidores a través de los canales correspondientes de manera rápida y asertiva en caso de estallar una crisis.
De igual forma, los comunicados de prensa siguen siendo una herramienta útil ante las fake news. Contar con un vocero previamente capacitado para atender a la prensa es de vital importancia; en caso de no contar con éste, lo más recomendable es acercarse a una agencia de relaciones públicas, que con su expertise solucionará de manera óptima cualquier crisis en los medios de comunicación, siempre cuidando la imagen de la marca y su relación con los consumidores.
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