Por Claudio Kandel
Director de DiSí Operaciones
Emprender es complicado y exige un constante aprendizaje, pues, cuando menos en los inicios, los empresarios están a prueba y error. Nadie sabe cómo se comportará el mercado; por lo tanto, es indispensable que busquen estar actualizados y apunten hacia una mejora continua.
Durante el arranque de un emprendimiento, es necesario realizar un constante análisis de lo que se está haciendo y cómo se puede mejorar. Identificar las áreas de oportunidad y realizar los cambios necesarios ayudarán a lograr los objetivos de la empresa.
La actitud siempre es importante. Un empresario que está abierto a adaptarse a las nuevas tendencias de mercado aumenta sus posibilidades de triunfar. La apertura al cambio y la perseverancia harán que los emprendimientos prosperen.
Pero, ¿cómo se logra esto? Sabemos que no existen fórmulas mágicas que funcionen para todos; entonces, resulta importante ser resilientes al cambio e implementar mejores prácticas de comprobada validez en cada sector.
Errores que debes evitar como empresario
Uno de los primeros pasos para poder tener una empresa es su formalización. Muchos negocios operan en la informalidad porque existe la percepción errónea de que es más conveniente en términos económicos, cuando en realidad sucede lo contrario.
Al no estar avalado por documentos que prueben su honestidad y capacidad de pago, un negocio informal no tiene acceso, por ejemplo, a créditos o financiamientos que le permitan aumentar su capacidad de producción o de abastecimiento de productos y puede perder oportunidades de negocio. En conclusión, para una Pyme no es opción ser formal: es una meta.
Otro error que suelen cometer los emprendedores es tener una mala gestión de los recursos. No tener claro cuánto, cómo y en qué se gasta el dinero puede generar sorpresas desagradables, sobre todo cuando es necesario cumplir con compromisos de pago.
Un plan financiero y un plan de uso de efectivo permiten dar el mejor uso a los recursos disponibles para mejorar, crecer y detectar oportunidades de expansión.
Por último, la tecnología avanza a pasos enormes y cada vez cobra mayor importancia. Podríamos pensar que las Pymes están en constante renovación, pero algunos líderes de empresas aún se resisten a dar el paso al mundo digital por creer que es costoso o difícil.
La digitalización permite realizar muchas tareas de manera más eficiente, tales como la administración de inventarios y de personal, la contabilidad, la cobranza, la gestión comercial, entre otras. Una empresa que apueste por la permanencia y el crecimiento tiene que digitalizarse para optimizar sus procesos.
En el camino de formar una empresa existen muchos pasos que parecen complicados o innecesarios, pero no es así. Cada cambio puede significar una oportunidad de evolucionar, crecer y avanzar hacia el éxito.
Sigue a The markethink y entérate de los temas más actuales y sobresalientes de la industria
