Ciudad de México.- Después de conocer las nominaciones de la 91° edición de los Premios Óscar, así como las diez categorías en las que la película «Roma» participa, las redes sociales se llenaron de distintos comentarios, llamando la atención aquellos que destacaban la participación de El Borras, el personaje canino que sale en la cinta de Cuarón, y en son de broma cuestionaban por qué no había sido nominado.
Ante este hecho, Pedigree dirigió una carta a la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas en la que pide la apertura de una categoría especial en la que se reconozca el valor de los perros y sus entrenadores en la industria del cine.
La vida de El Borras, como la de cualquier otro actor, ha estado llena de altibajos. Se trata de un perro callejero que, tras haber sufrido de maltrato animal, fue rescatado por quienes después se convertirían en sus entrenadores. Una vez que fue rehabilitado, ya que tenía desnutrición severa, sarna, pulgas y conjuntivitis, el cuadrúpedo fue elegido para participar en «Roma», no sólo por tener la suerte de contar con características muy similares a las del perro que el director tuvo en su infancia, sino por el desempeño que mostró frente a las cámaras.
“El trasfondo de esta carta no es sólo pedir una categoría especial para los perros y sus entrenadores, sino reconocer todo lo bueno que traen a la sociedad y mostrar que, tal como sucede con los actores de primer nivel, son capaces de evocar en nosotros diferentes sentimientos, ya sea enternecernos hasta las lágrimas, suspirar, sonreír o simplemente hacernos más humanos”, expresó Jorge Martínez, brand manager de Pedigree México.
Esta petición fue compartida a través de los perfiles de Facebook, Twitter e Instagram de la marca, donde invita a los usuarios a sumarse a la campaña a través del hashtag #Dogscar.
Sigue a The markethink y entérate de los temas más actuales y sobresalientes de la industria.
